Carito Figueroa
octubre 28, 2024
La inteligencia emocional (IE) se ha convertido en una competencia esencial en el entorno laboral. Este artículo explora su relevancia y cómo puede evaluarse en entrevistas para asegurar una selección de talento efectiva y alineada con la cultura organizacional.
La gestión emocional incluye la capacidad de entender y gestionar nuestras propias emociones y las de los demás. Esta habilidad ayuda a los empleados a responder mejor en momentos de estrés y adaptarse a situaciones desafiantes, creando un ambiente laboral más productivo y positivo.
Las habilidades blandas se ha convertido en una de las habilidades más demandadas en el mundo laboral moderno. Al evaluar la Inteligencia Emocional en las entrevistas, las empresas obtienen una visión más completa del candidato, lo cual ayuda a construir equipos cohesionados y efectivos. Algunos beneficios clave de incorporar la evaluación de IE en el proceso de selección incluyen:
Es fundamental reconocer que las competencias interpersonales se manifiesta de diferentes formas en función del contexto y de la situación particular de cada candidato. La evaluación de la inteligencia emocional de esta competencia puede variar entre un puesto directivo, que requerirá de habilidades de liderazgo y toma de decisiones bajo presión, y un puesto en servicio al cliente, donde la empatía y la comunicación son esenciales.
Para obtener una visión completa, es recomendable adaptar las preguntas de acuerdo con las responsabilidades específicas del puesto. Por ejemplo, en roles donde la gestión del equipo es crítica, se pueden hacer preguntas como “¿Cómo manejas situaciones de conflicto dentro de tu equipo?” o “Cuéntame sobre una vez en la que tuviste que mediar entre compañeros de trabajo.” Este tipo de preguntas permite una evaluación más precisa de cómo un candidato podría enfrentar los retos emocionales específicos del rol.
Esta práctica permite que los entrevistadores tomen decisiones basadas en el potencial de los candidatos para contribuir al éxito de la organización, promoviendo un ambiente de crecimiento y colaboración.
Incluir preguntas abiertas ayuda a revelar las competencias blandas de un candidato. Algunas preguntas útiles son:
Estas preguntas exploran habilidades como la autorregulación y la empatía, elementos clave de la Gestión emocional
Además de las preguntas, los ejercicios prácticos pueden ser efectivos para observar la inteligencia emocional de los candidatos:
Al evaluar habilidades emocionales, algunos errores pueden comprometer la objetividad:
“La inteligencia emocional ha sido fundamental para el éxito de nuestro equipo. Cuando los miembros saben cómo manejar sus emociones, logran trabajar de manera colaborativa y evitar conflictos innecesarios. He visto cómo, en momentos de presión, la capacidad para mantener la calma y escuchar al otro marca una diferencia enorme en los resultados del proyecto. Es algo que, sin duda, priorizamos en el proceso de selección de personal.”
— Andrea López, Gerente de Proyectos en Innovatech
“Al principio, pensé que las habilidades blandas no eran tan valoradas como las técnicas, pero durante mi última entrevista, me di cuenta de que saber gestionar el estrés y la comunicación fueron aspectos muy valorados. Mi capacidad para entender el ambiente y comunicarme con claridad incluso en momentos difíciles fue lo que, según me comentaron, me dio la ventaja. Me ha ayudado a desarrollarme profesional y personalmente.”
— Carlos Méndez, Analista de Marketing
Evaluar la gestión emocional en entrevistas es crucial para crear un equipo de trabajo resiliente y colaborativo. Incorporar preguntas abiertas y ejercicios de role-play ayuda a identificar candidatos que se alineen con los valores de la empresa y promuevan un entorno laboral positivo.
Frase para Inspirar
“Contrata personas que crean en lo que tú crees.” – Simon Sinek